Un corazón valiente.

[#MamádeMau]

Cada jueves papá y yo celebramos una semana más de tu espera, de esa espera que, como digo yo, desespera. En momentos como estos lo único que nos toca es ser pacientes porque lo mejor aún está por venir. 

Hace unas semanas, como de costumbre porque ya soy caserita de estos temas, tocó ir de emergencias. Al parecer este cuerpo loco no asimilaba aún la idea de tenerte dentro de mi. 

En estos tiempos el seguro social es un mounstruo horrible que no te entiende explicaciones. Un mounstruo sin cerebro que no puede diferenciar la emergencia entre una sutura en la rodilla y una amenaza de aborto. La abuela peleaba por todos lados buscando una atención coherente hasta que papá se hartó y nos llevó lejos de ese mounstruo, tomamos un taxi y cruzamos nuevamente la ciudad. 

Por suerte y con mucha ayuda pudimos atendernos en otro lugar. Entramos a consultorio, me puse la bata y el doctor enseguida te buscó. Y ahí estabas, arroz, con tu corazón latiendo fuerte y por primera vez te vimos mas grande, papá te escuchó y vio por primera vez, los ojos le brillaban en cada movimiento tuyo y creo que su corazón saltó tan fuerte, pero tan fuerte, que no atinó siquiera a coger el móvil para grabar tus pequeños movimientos mientras el médico hacía un súper zoom para dejarle ver tus largas piernas y tus grandes manos, serás un gran arroz, lo presentimos.

Llegamos a casa de la abuela con más calma, y a las buenas noticias le siguieron las apuestas. Algunos dicen que serás una niña, otros un niño. A mi no me importa lo que decidas ser, lo que sí tengo claro es que serás una persona muy valiente.

Luego de eso todo había pasado, lo único que tenía que hacer era seguir amándote y aferrarme a la idea de que aún quieres estar con nosotros. Gracias por dejarme escuchar tu corazón y abrocharte muy fuerte el cinturón, pequeño arroz. 

Gracias por darme la inmensa alegría de esperarte. Te amo. Te amamos.