¿Mascotas y embarazo? Un consejo.

Seguramente una de las primeras cosas que has escuchado en los primeros tres meses de embarazo, es que tengas a tu mascota (sobretodo si es gato) lo más lejos posible de ti.

El temor que, fundamentalmente, un gato conviva con una mujer embarazada surge de la posibilidad de que porte el Toxoplasma Gondii, pero no te alarme, el Toxoplasma Gondii es un parásito que cumple parte del ciclo vital en el aparato digestivo de los felinos y de otros animales domésticos que ingresa en ellos a través de la carne cruda.

Si bien es cierto que es importante cuidar el control alimenticio de nuestras mascotas, cabe destacar que no todos los animales son portadores de este parásito, sin embargo, uno de los primeros exámenes de laboratorio de rutina que se hacen a las embarazadas es la prueba de Sabin-Feldman que permite detectar sin mayor problema la presencia de la infección.

Por ello no es necesario alarmarse, lo primero es consultar con tu médico y lo segundo, con el veterinario.

Puedes consultar aquí sobre el Toxoplasma Gondii y aquí sobre la prueba de Sabin-Feldman .